lunes, 28 de diciembre de 2009

REFLEXIONES DE NAVIDAD


Anquilosada, en el estado de lo pétreo, ensimismada. Así es la cara real de mi Navidad.
Extrovertida, hospitalaria, maestra de lo culinario. Así es la cara externa de mi Navidad.
Esa vertiente exterior no es más que un mágico velo, tullido e inexistente.
Lo que vivo ahora es un traslado a lo pasado y no vivido, al entramado de un Misterio mayor ininteligible por inalcanzable. Es el Niño, es la Familia, es la dimensión divina de lo terrenal. Y así quiero que sea.
Olvidemos los empachos, lo material, adentrémonos en la esencia todos los que fe tengan.
Hay una eclosión de risas y de tristezas, borrémosla. Volvamos a lo pétreo que nos acerque a las Alturas.

4 comentarios:

enrique dijo...

Misterio...

Reflesiones hemosas y muy bien trabadas...
Feliz Nvidad y mejor año nuevo.

Bowman dijo...

Mein Schatz Morgenrot, sabes que soy tu amigo más cansino y el que más te lleva la contraria, así que me permito ejercer de mí mismo y (¡oh, otra vez no!) discrepar.

No. Lo pétreo no nos acerca a las alturas... excepto para los que gozamos del alpinismo y la montaña. E incluso para nosotros, la dureza de la piedra es a la vez cálida (gracias al sol) y es nuestro adorado soporte.

Tu proposición, en cambio, me recuerda a la máxima opusina aquella de "por el sufrimiento hacia Dios".
Sé que resulta pretencioso que un ateo pretenda interpretar las escrituras, pero estoy convencido que, si alguien nos ha dado la vida, es con la intención de que la disfrutemos con alegría.

Quizás me contradiga porque, en efecto, escalando piedras también se sufre. Pero no se borran las risas ni el disfrute.
No las borres tú como si fuera necesaria tal penitencia. Las Alturas no exigen eso. Hacerlo así sería equivalente a un desplante hacia quien nos hace un regalo.

La Navidad, para el creyente, es la celebración de un regalo. Deberíamos (¿mos? ¿ha salido esto de mis dedos? ;-) aceptarlo y disfrutarlo como agradecimiento.

En pocas palabras (algo harto difícil para un pedante como yo): Sé feliz
A las Alturas eso les agradrá, seguro.
(Y, por qué no, a mi tambien)

Feliz Navidad

Morgenrot dijo...

Enrique, ante todo, disculpa el retraso en contestar, es que he estado unos días fuera de casa.

Me alegró bastante tu comentario, te lo agradezco y te ruego aceptes mis buenos deseos hacia tu persona de un ¡ Feliz Año Nuevo !, que no es fácil, con todo lo que conlleva.

Un abrazo

Morgenrot dijo...

Bowman, mi apreciado y admirado Bowman, ¡ cómo añoro tus post y tus comentarios !. Este que me has hecho lo aprecio con el alma entera, pues encuentro una hermosísima buena fe en ti y ,a la vez, una coherencia fuerte con tus principios, respetando como pocos a los que pensamos de forma diferente.

Creo haber entendido tu mensaje, quizás tú comprendas la Navidad mejor que yo, porque transmites esa esperanza tan necesaria para poder ser un poco feliz.

Sólo me permito hacer un comentario: cuando me refiero a lo pétreo no pienso en la resignación y el autocastigo, sino en lo sorprendente , aquello que te deja de piedra.
Pero la vida, ciertamente, no me parece un peraíso, vivir produce un profundo dolor, aunque hay flores que te hacen sonreir, como encontrarse con personas como tú.

Un beso enorme con todo mi corazón y,...mil gracias